Confieso, cuando me apresto a ir a mi trabajo y me despido de mi esposa, no se si vaya a regresar, de manera que al despedirme lo hago con mucho temor. Otra certeza, que es necesario sacarla del tintero, esta inseguridad en la que estamos sumidos todos los ecuatorianos, es peor cada día, no da visos de mejoría por mas que las autoridades policiales y del gobierno, digan y prediquen que está bajando el índice delincuencial, así no lo sienten 14 millones de almas. Y es que, desde hace 5 años, tenemos estas infelices coincidencias, Guardianes sin armas, ciudadanos armados pero de valor (las otras nos la quitaron), una delincuencia armada con lo mejor que se puede conseguir en esta materia con procedencia de los mercados clandestinos, mas garantías para los ladrones (ahora no se los puede ni tocar, ver lo sucedido a Carolina Jaume), agregaré que el narcotrafico gravita cada día mas, y no es que se capture menos o mas droga, el tema y la pregunta es de donde sale tanta droga?, En realidad, atrapamos o confiscamos toda la droga que viene de los vecinos?. Creo que no, pues si así fuera, los carteles no insistirían mas en pasarla por nuestro país. Finalmente, el ajuste de vidas humanas vía sicariato, está presente, por coincidencia desde que la droga empieza a comercializarse desde la franquicia ecuatoriana, me refiero al incremento tan geométrico que ha tenido, los últimos 5 años.
Hay que ingeniar y no tener vergüenza de solicitar en este campo asesoría, de países como Colombia, ellos, siendo país productor, erradicaron la violencia con éxito, y esto no merece ser discutido. Hoy se puede caminar por Bogotá, por Cali y Medellin. Nueva York es otro ejemplo, en los últimos 10 años se propusieron erradicar la violencia menor y mayor, y lo han conseguido, hubo un alcalde involucrado en el tema y su gestión en el campo también fue exitosa. Perú, con todos los defectos de la presidencia de Fujimori, erradicó la violencia de sus patios. Queda Ecuador, mercado creciente de sicariato, tráfico de drogas, que necesita que sus autoridades se reunan con mentes experimentadas y que hayan sido participantes activas de dicha lucha contra la inseguridad. Si se nos pregunta cual es el sentimiento que mas profesamos 14 millones de ecuatorianos, la respuesta es una e indiscutible, Miedo. Todos los habitantes de este país estamos prestos a colaborar con las autoridades, todos, solo falta que nos guíen en el cometido y todos coincidimos que la Policia hace todo lo que puede, pero se necesita mas.